Todo el mundo ha sentido alguna vez los síntomas de la ansiedad,(http://www.ansiedadsintomas.es) en ocasiones de forma breve, sólo durante unas horas, o
desgraciadamente en otras ocasiones de forma más duradera; durante días, meses,
años, o incluso durante toda una vida. Como parte de nuestra propia condición
de ser humano, la ansiedad es tan inherente a nosotros como nuestra mismísima
condición de supervivencia. Gracias a su existencia siempre hemos
conseguido adaptarnos al medio que nos rodea y obtener un resultado beneficioso
para nuestra especie con relación a él.
Vista de esta manera, ¿ cómo semejante virtud
puede ocasionarnos problemas tan grandes?. Caprichosa y desconocida, un día
puede cabalgar hacia nuestras vidas y cambiarla para siempre sino conseguimos
controlarla. A veces es difícil verla llegar, pero siempre podemos conocer cuáles
son sus jinetes más característicos convertidos en sus principales trastornos:
1.TRASTORNO DE ANSIEDAD GENERALIZADA.
Las personas afectadas por este trastorno,
sienten los efectos de la ansiedad la mayoría del tiempo. Sus preocupaciones
son persistentes (al menos el 50% de los días durante un periodo de seis
meses), intensas e irracionales. No están asociadas a ningún componente
específico, y sus efectos interfieren en el funcionamiento de su vida
cotidiana: el trabajo, los amigos, la familia... se ven afectados por sus
consecuencias ya que son difíciles de controlar.
2.TRASTORNO DE PÁNICO.
Mientras que el trastorno de ansiedad
generalizada se conoce como ansiedad rasgo, porque es más duradero, el
trastorno de pánico se conoce como ansiedad estado, pues
sus síntomas se
muestran de forma aguda. Las personas afectadas por este trastorno,
experimentan sensaciones de muerte o la posibilidad de quedarse sin aire. Causa
tanto síntomas físicos como psicológicos de forma muy intensa, y en ocasiones
requiere hasta de hospitalización. Su duración se estima entre los 10 minutos y
30 minutos, y su frecuencia va desde varias veces al día o sólo una vez cada
pocos años.
3. TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO (T.O.C.).
Caracterizado por sufrir pensamientos, imágenes o
ideas de tipo intrusivo que producen la ansiedad, causan obsesiones que a su
vez provocan en la persona la realización de acciones o rituales
denominados compulsiones destinados a aplacar la ansiedad producida por dichos
pensamientos.
4. TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMATICO.
Un accidente de tráfico, un abuso sexual, haber
sufrido torturas... son algunos de los sucesos traumáticos que pueden
desencadenar este trastorno. Las consecuencias de estos eventos, como es
lógico, pueden desencadenar un gran estrés psicológico, resultando altamente
incapacitante para la persona que lo sufre. Producto de la enorme ansiedad que
siente el individuo, éste evitará situaciones o actividades que le
recuerden de alguna manera el trauma sufrido.
5. FOBIA SOCIAL.
Este trastorno se identifica porque las personas
que lo sufren padecen un miedo irracional ante situaciones de interacción
social. Dependiendo de la intensidad, puede llegar a ser un trastorno muy
serio, ya que algunas personas se ven incapacitadas incluso para hablar por teléfono
o poder simplemente comer frente a otras personas. Es recurrente mezclar o
confundir la timidez con fobia social, pero es un error, ya que no todas las
personas que son tímidas padecen fobia social.
6. AGORAFOBIA.
Por el origen de la palabra, se suele definir la
agorafobia como el miedo a permanecer en espacios abiertos, si bien no es una
definición completamente exacta, ya que en realidad el agorafóbico siente una
profunda angustia a sentirse vulnerable y desprotegido, circunstancia que le
produce una profunda ansiedad y que se da habitualmente cuando se encuentran en
lugares públicos o espacios abiertos, pero no solo en estos sitios, sino en
cualquier sitio donde la persona no se sienta confiada y segura (puede ser el
metro, un centro comercial, un museo…). Por ello en los casos más agudos los
pacientes agorafóbicos tienden a acabar recluidos en sus casas, donde se
sienten seguros.
7. FOBIA ESPECIFICA.
En este trastorno la ansiedad desencadenante
viene determinada por un miedo irracional a un estímulo muy concreto. Al igual
que en los otros trastornos la persona afectada por esta fobia, tiende a evitar
el estímulo desencadenante del proceso ansioso. En algunos casos limita de
forma muy sensible la vida del afectado. Las fobias pueden ser comunes, pero en
algunos casos también raras… miedo a las arañas, a los payasos, a enamorarse, a
las alturas… son ejemplos de este tipo de fobias.
¿Te sientes o te has sentido identificado con alguno de estos miedos? Deja tu comentario y cuéntanos como lo superaste o cuales son tus trucos para convivir con ellos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario